La eficiencia energética está definida como un proceso de optimización del consumo total de la energía. Esto para alcanzar niveles adecuados en cuanto a la prestación de servicios eficientes. Así como también, en cuanto al coste que se genera por consumirla y los efectos que tiene sobre el medio ambiente.
Un ejemplo de este concepto, sería el consumo de electricidad. Ya que debe ser adecuado a las necesidades de los usuarios, sin despilfarros. De igual manera, la regulación de este consumo, está acompañado de diversos mecanismos para ahorrar energía. Si se ahorra, las perdidas en el proceso se van a minimizar. En las naciones, por ejemplo, tener niveles óptimos de eficiencia energética, van a garantizar el suministro de energía para toda la población durante mucho tiempo.
¿Por qué es importante tener presente la eficiencia energética?
La eficiencia energética se trata de utilizar menos energía por medio de acciones efectivas. Lo cual es bueno tanto para la economía, como para tus finanzas. Al reducir la cantidad de energía necesaria para determinadas tareas, la eficiencia energética también es beneficiosa para el planeta.
Esto debido a que puede ayudar a reducir la contaminación del aire y del agua causada por ciertos tipos de generación de energía. Así, se evitan impactos negativos en ecosistemas críticos, como los obstáculos que una nueva represa hidroeléctrica podría imponer a peces migratorios. También, puede aliviar la tensión en la red eléctrica.
La eficiencia energética puede reducir las emisiones de carbono
Aumentar la eficiencia energética de los edificios, vehículos, electrodomésticos y equipos electrónicos, es una forma barata y de bajo impacto de reducir la contaminación climática a gran escala. Una forma bastante eficaz de reducir las emisiones de dióxido de carbono (CO2), es a través del establecimiento de un hogar más eficiente.
El uso generalizado de electrodomésticos, equipos electrónicos e iluminación eficiente, junto con un mejor aislamiento y otras medidas de climatización, podría reducir 600 millones de toneladas métricas de contaminación por carbono al año para el 2050. Lo que equivale a las emisiones de energía eléctrica producidas por al menos 5 naciones en el año 2016.
Ayuda a la creación de puestos de trabajo
En el mundo, millones de personas poseen puestos de trabajo en el ámbito de la producción de energías renovables. Eso es más de 6 veces los puestos de trabajo en las industrias de energía convencional o “sucia”. Esto incluye el carbón, el gas y el petróleo. De hecho, uno de cada cinco trabajos en algunas naciones, están relacionados con la eficiencia energética.
Reduce los costes de facturas eléctricas
Los electrodomésticos de bajo consumo pueden ahorrar a un hogar hasta 400 dólares al año en las facturas de los servicios públicos. De hecho, según investigaciones en varios países, los habitantes de estados o provincias que tienen distribución de energía no muy eficiente, ven como las facturas por electricidad aumentan más del doble que en estados o provincias que han cambiado al consumo eficiente de la energía.
De igual manera, los hogares urbanos de bajos ingresos tienen una carga energética tres veces mayor que la de los hogares de mayores ingresos. Esto debido a la falta de climatización. De hecho, la carga energética de las familias rurales con bajos ingresos es casi tres veces mayor que la de otros hogares rurales.
La eficiencia energética mejora la calidad de vida de las personas
La eficiencia energética puede ayudar a las personas a vivir de forma más saludable y prolongada. Reducir el consumo de energía en todo un país en un 20% durante un año, a través de medidas de eficiencia, podría ayudar a salvar cinco vidas al día. Además, puede ahorrar hasta 20 mil millones de dólares en problemas relacionados con la salud. Cuando las plantas eléctricas queman carbón, petróleo y gas natural, liberan pequeñas partículas en el aire que todos respiramos.
Así, estas partículas están relacionadas con el asma, los ataques al corazón y el cáncer de pulmón. Dentro de una casa, la ventilación y la climatización ineficientes pueden contribuir a las enfermedades respiratorias. La eficiencia energética puede incluso mejorar el confort de la vida cotidiana. Este parámetro a menudo no se tiene en cuenta en algunas estadísticas acerca de la importancia de este hábito.
Puedes ser inteligente en el uso de la energía
En primer lugar, empieza por apagar los aparatos electrónicos, modificar la configuración de tu televisor, ajustar la temperatura y programar temporizadores. Tienes que estar en la búsqueda constante de los “vampiros energéticos”, que consumen electricidad incluso cuando están inactivos o apagados.
Los electrodomésticos eficientes son económicos
Actualmente, existen electrodomésticos identificados con etiquetas de eficiencia energética. Estas etiquetas van desde la letra C o D, las cuales son etiquetas de equipos poco eficientes, hasta la letra A+++, los cuales son electrodomésticos con un alto nivel de eficiencia y ahorro energético. En promedio, estos aparatos eficientes, pueden ahorrarte casi cinco dólares por cada uno gastado en facturas de electricidad. No te preocupes por encontrarlos, ya las etiquetas de eficiencia vienen en más de 80 tipos distintos de ellos.
Aumenta la eficiencia en la calefacción y la refrigeración
Si solo 1 de cada 10 hogares compra equipos de calefacción y refrigeración con etiquetas de eficiencia energética, se evitarían emitir 14 mil millones de toneladas de gases de efecto invernadero al medio ambiente al año. Lo que equivale a las emisiones anuales del tubo de escape de 1,5 millones de coches. Igualmente, los equipos de aire acondicionado, las unidades centrales de aire acondicionado y las bombas de calor con etiquetas eficientes, pueden reducir tu factura energética en más de 180 dólares.
Con el Máster en Energías Renovables y Proyectos Energéticos, podrás saber todo lo relacionado a esta nueva forma de evitar la contaminación. Esto debido a que recibirás los conocimientos necesarios para que puedas ahorrar energía en tu casa y en tu sitio de trabajo de manera constante.